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Actividades de verano

Todo niño espera con ganas la llegada de las vacaciones de verano. Eso significa que empiezan las actividades estivales, los chapuzones en la playa o la piscina, las vacaciones en familia... Sin embargo, para los niños de Mae Sot la realidad es muy diferente.

En el orfanato Safe House la llegada del verano no significa otra cosa que tener que hacer cada día lo mismo, en el mismo sitio y con la misma gente. Eso hace que los niños estén más alterados, se alboroten y estén inquietos, no tienen una vía de escape. Sus vacaciones no se asemejan en nada con la realidad de otros niños más afortunados ni tiene nada que ver con las que hemos vivido cualquiera de nosotros. Por eso si hay una cosa con la que el equipo de Colabora Birmania disfruta más es dedicando su tiempo para que el verano de estos niños sea en la medida de lo posible lo más parecido al que nosotros recordamos de pequeños.

En el mes de abril se celebra en Tailandia el Songkran, la fiesta del agua que da la bienvenida al nuevo año tailandés, y los niños nos pidieron emocionados que lo fuéramos a pasar con ellos. Y así hicimos. Les compramos pistolas de agua y compartimos unas reñidas batallas acuáticas bailando al son de animadas canciones birmanas. ¡Sin duda la mejor fórmula para paliar el calor de esos días!

¿Y hay otra mejor forma de pasar el verano que yendo algunos días a la piscina? Gracias a la donación de una de las madrinas del orfanato, Fran Ewald, hemos podido realizar el 2º cursillo de natación para los más de 60 niños que viven en él. Además de aprender a nadar con una profesora de natación, han podido disfrutar de unos días de juego y diversión que les ha sacado por unas horas del orfanato.

En la escuela km 42 hay 44 niños que, bien por ser huérfanos o porque sus padres no viven en el área de Mae Sot, viven internos en la escuela todo el año. Aunque las instalaciones de la escuela cuentan con un amplio espacio donde jugar y disfrutar del tiempo libre (más ahora que tienen la nueva zona de deporte) también hemos querido hacer algo especial con ellos para que disfruten de un día diferente. Gracias a una donación extra recibida, les organizamos una excursión a las cascadas, les llevamos refrescos, arroz gelatinoso, pollo y galletas. ¡Una buena recompensa para recargar toda la energía derrochada jugando en el agua! Además, durante este tiempo les hemos preparado comidas y cenas diferentes a las que comen habitualmente para que se repongan de sus juegos saboreando una comida especial.

Esperamos seguir haciendo su verano más especial y que lo disfruten como niños, que es lo que les toca hacer ahora. Gracias a todos los que habéis ayudado con vuestro tiempo y vuestras donaciones a hacer que haya sido un verano inolvidable.

Si quieres ver cómo han disfrutado de estas actividades pincha aquí.

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